Baja los vidrios del auto, haz el asiento hacia atrás y apaga la radio porque va a empezar la función. No se trata de una sala chiquita de cine, tampoco es un estacionamiento, es un autocinema.
Esta modalidad de cine hace que uno se sienta como los protagonistas de Vaselina: bailando entre los autos llorándole a la novia con la pantalla de fondo, justo como John Travolta.
Coches estacionados y una pantalla enorme en frente es lo que te encontrarás al llegar a este lugar con aires retro.
Las proyecciones son de películas clásicas y recientes; sesiones especiales de medianoche donde la película es sorpresa y, si tienes suerte, puedes incluso ver una cinta musicalizada en vivo.
Viaje al pasado.
Dónde: Lago Zurich 200. Granada.
Costo: $250 por coche sin importar número de personas.